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Padecimientos

Diabetes


Es una enfermedad crónica degenerativa, ocasionada por la falta de la secreción pancreática de la hormona insulina o su falta de efecto a nivel muscular una vez secretada; que es esencial para el metabolismo adecuado del azúcar de la sangre. Actualmente la diabetes mellitus es la primera causa de demanda de atención medica, principalmente en la edad adulta.

Los casos de diabetes tipo-2 van aumentando en México y en el mundo; al ocupar un lugar importante en nuestro país, donde se registran 12 millones de personas afectadas, de las cuales el 50% desconocen su condición y del otro 50% escasamente la mitad asiste a consulta médica y aún de este grupo sólo el 20% tiene un control adecuado de la enfermedad.

En entrevista el Dr. Alejandro Correa Flores, Endocrinólogo Especialista en Diabetes, del Departamento Clínico de Endocrinología del Hospital de Especialidades de Centro Médico "La Raza" explica que para la diabetes no se conoce una cura actualmente, pero con un buen tratamiento y manejo se puede controlar, para evitar futuras complicaciones.

¿Qué es la diabetes?

Es una alteración en el metabolismo del azúcar que se manifiesta con un incremento de concentraciones en la sangre, ocasionado ya sea por una deficiencia absoluta o relativa en la secreción de insulina, o bien una falta del efecto de la insulina en el músculo, que es lo más frecuente.

¿Cuáles son las causas?

  • Es una enfermedad hereditaria
  • Mala alimentación regularmente basada en harinas, azúcares y grasas
  • Obesidad
  • Sedentarismo (falta de ejercicio)
  • Causas inmunológicas

¿Cuáles son los síntomas?

  • Fuerte pérdida de peso
  • Sed intensa
  • Orinar bastante
  • Comer demasiado
  • Cansancio intenso
  • Tener sueño frecuentemente después de comer

En muchos casos no aparecen los síntomas clásicos y la enfermedad puede ser silenciosa, y su diagnóstico se hace tardíamente.

¿Cuántos tipos de diabetes mellitus hay?

Hay 5 formas principales en que puede presentarse la diabetes.

1.- Diabetes tipo 1 o diabetes insulinodependiente.- Es cuando las células que producen insulina en el páncreas se destruyen por causas inmunológicas y ocurre deficiencia total de insulina. La padece solo el 10% de los diabéticos y tienden a desarrollarla habitualmente personas jóvenes menores de 20 años. En su tratamiento siempre se utiliza insulina.

2.- Diabetes tipo 2 o diabetes no insulinodependiente.- Ocurre cuando el páncreas continúa produciendo insulina incluso en valores más elevados de los normales en las fases iniciales. Es la Diabetes más frecuente, hasta un 90% de las personas la padece, habitualmente se identifica en una etapa adulta de más de 30 años. Su manejo puede ser con dietas y tabletas.

3.- Diabetes tipo mody.- Este tipo de diabetes es cada vez más frecuente, se presenta en jóvenes que tienen obesidad y antecedentes hereditarios de padres y/o abuelos incluso hermanos jóvenes diabéticos. Al igual que el diabético tipo 2, produce cantidades altas de insulina. En su tratamiento no requieren de insulina a pesar de que son jóvenes. Se puede controlar con dietas o con tabletas y su comportamiento es similar al del diabético tipo-2 adulto.

4.-Diabetes secundaria.- En este tipo de diabetes la elevación del azúcar, se debe a otras causas como pueden ser tumores que producen cantidades elevadas de hormona de crecimiento, o cortisona, o bien por destrucción de las células productoras de insulina, como pancreatitis o tumores de páncreas. Otras causas de esta diabetes, son la toma en forma crónica de medicamentos como la cortisona que alteran el metabolismo del azúcar.

5.-Diabetes gestacional.- Ocurre durante el embarazo, frecuentemente aparece en la semana 26 ó 28 de la gestación, por incremento de las hormonas del embarazo y si la persona es obesa o tiene familiares con diabetes el riesgo es alto de padecerla. Por lo que se recomienda que las mujeres que se van a embarazar no tengan obesidad y tengan control prenatal continuo.

¿Cuáles son los estudios para detectar la presencia de diabetes?

A menudo se determinan los valores de azúcar en la sangre durante un examen médico de rutina o durante la exploración clínica.
Los valores normales de azúcar o glucosa en sangre de ayuno deben ser de 70 a 110 mg/dl, pero si la glucosa se encuentra entre 110 y 125 mg/dl ya no se consideran un rango normal sino azúcar de ayuno alterada. Un valor igual o mayor de 126 mg/dl, establece el diagnóstico de diabetes mellitus. En las mujeres embarazadas de alto riesgo se deberá realizar un estudio llamado curva de tolerancia a la glucosa para diagnosticar la diabetes.

Una persona que tiene los síntomas anteriormente mencionados y que además tiene antecedentes de familiares diabéticos, incluyendo obesidad, debe realizarse un estudio de sangre para medir el nivel de azúcar en ayunas y 2 horas después del desayuno.
Cuando un paciente ya tiene diabetes, se debe controlar y dar seguimiento con el tratamiento correspondiente.

¿ Cuáles son los estudios para valorar el buen control de la persona con diabética?

  • Determinar la hemoglobina glucosilada en sangre cada 3 meses para conocer su grado de control previo.
  • Medir colesterol, triglicéridos, ácido úrico, creatinina, y urea en sangre mediante análisis de laboratorio.
  • Determinar depuración de creatinina y albúmina en orina de 24 horas, cada 6 meses, para valorar su función renal.
  • Medir glucosa en sangre en ayuno y 2 horas después del desayuno.
  • Checar la glucosa en la sangre rutinariamente con glucómetro (aparato para medir la glucosa en la sangre).

¿En qué consiste el tratamiento para la diabetes?

El objetivo principal del tratamiento es mantener los niveles de azúcar en la sangre, dentro de los valores normales, y radica en:

  • Una buena alimentación baja en harinas, azúcares y grasas
  • Caminar y hacer ejercicio de acuerdo a las indicaciones médicas
  • Bajar de peso si hay obesidad
  • Evitar el consumo de bebidas alcohólicas
  • Evitar el tabaquismo
  • Lavar y cepillar regularmente dientes, lengua y encías con pasta dental
  • Revisar los pies diariamente, lavarlos a diario con agua y jabón
  • Verificar la temperatura del agua con las manos antes de meter los pies
  • Seguir las indicaciones médicas (tomando antidiabéticos) y dietas alimenticias prescritas por el especialista

Cada paciente debe ser tratado en forma individual de acuerdo a su talla, peso y actividad física. Algunos fármacos orales mejoran la secreción de insulina, pero no todos se pueden utilizar en los pacientes. Hay otro tipo de medicamentos como la insulina, así como inhibidores de la absorción del azúcar en el intestino (inhibidores de alfa glucosidasas), no se puede utilizar en cualquier persona, se recomienda que los pacientes sean seleccionados para que realmente respondan a ese tipo de fármacos.

Hay otros dos tipos de tabletas para la diabetes que son las sulfonilureas, que sirven para bajar el nivel de glucosa en la sangre, estimulando la secreción de insulina, y otras como las biguanidas que pueden mejorar el efecto de la insulina en el músculo, asimismo disminuyen también la producción de glucosa por el hígado, y de esta manera mejoran los niveles de azúcar de la sangre.
La mayoría de las personas tienen la idea de que la insulina puede causar ceguera, pero esos son tabús ya que la insulina humanizada que se utiliza es idéntica a la que producen todos los seres humanos.

Los pacientes diabéticos que no llevan un buen control de la enfermedad pueden llegar a padecer ceguera, pero la insulina no tiene nada que ver con el daño en la retina, por el contrario, con la aplicación de la misma se va a lograr un mejor control de la glucosa. De esta manera se logra que el paciente tenga una mejor calidad de vida en un futuro, porque se trata de un proceso crónico, degenerativo que va a durar toda la vida.
La atención a la persona que padece diabetes debe ser de la mejor calidad posible, para que pueda valerse por sí mismo y que no sea dependiente; evitando la complicación grave como la ceguera, la insuficiencia renal, infarto cardíaco y daños a las extremidades inferiores que es muy frecuente en este tipo de pacientes.

¿Qué tan costoso es el tratamiento para una enfermedad de este tipo?

Es muy alto el costo porque se trata de una enfermedad crónico degenerativa.
El tratamiento debe basarse en la modificación de los hábitos de alimentación, en el paciente y la familia, el costo es muy alto cuando se agregan fármacos y cuando aparecen complicaciones tardías. Por ejemplo, si el paciente tiene 20 años de edad, y adquiere diabetes, va a estar consumiendo medicamentos por un largo tiempo. Es por eso que hay que aprender a cuidarse y aprender a conocer los síntomas para saber qué hacer en caso de un descontrol agudo. La persona que presenta algunos síntomas debe acudir con el médico para ser evaluado y para que el diagnóstico de diabetes mellitus y sus complicaciones sean realizados oportunamente.

¿La diabetes tiene cura?

Hasta el momento esta enfermedad no tiene cura.
Muchos pacientes acuden erróneamente a la medicina alternativa y suspenden sus fármacos con graves consecuencias. Hay grupos de pacientes que toman nopal y otros remedios tradicionales, yo lo que hago con el grupo de pacientes es primero respetar sus ideas, siempre y cuando no suspendan el plan de alimentación o los medicamentos.

¿Se puede prevenir la diabetes?

Claro que se puede prevenir, con la educación, la cual es fundamental para ese tipo de enfermedades, en las que tenemos que cambiar los hábitos del paciente y de la familia. Como parte de la prevención se puede mencionar:

  • Cambiar los hábitos alimenticios, comenzando con ingerirlos a horas determinadas
  • Tratar de consumir la mayor cantidad de fibra dietética en los alimentos
  • Reducir el consumo de harinas, azúcares y grasa saturada
  • Procurar hacer ejercicio regularmente para acondicionar el sistema cardiovascular y mejorar los niveles de glucosa en sangre.
  • Dejar de fumar
  • Controlar la presión arterial.

¿Qué puede pasar si las personas descuidan el control de la diabetes?

Puede provocar complicaciones agudas o tardías, por lo tanto su detección en etapas tempranas permite retrasar e incluso evitar las complicaciones agudas como la cetoacidosis o coma diabético, que se caracteriza por experimentar rápidamente sed intensa, visión borrosa, cansancio, hambre, orinar frecuentemente, deshidratación, náusea, dolor de cabeza o pérdida del conocimiento. Estos deben atenderse urgentemente.
La presencia de factores descompensadores de la glucosa puede favorecer la aparición de complicaciones crónicas como:

  • Ceguera (daño en retina y cataratas)
  • Problemas bucales y dentales (aflojamiento de piezas dentales)
  • Infecciones de piel y mucosas (aftas o algononcillo en boca, pene o vagina)
  • Neuropatía (daño de los nervios en piernas y cara)
  • Impotencia sexual
  • Pie diabético y una posible gangrena.

¿A dónde se debe acudir?

Es conveniente que la persona que padece de diabetes mellitus acuda con un médico que conozca lo que realmente es esta enfermedad, ya que la diabetes no es nada más elevación de azúcar, sino que, conlleva una serie de alteraciones metabólicas que debemos conocer.
El especialista que conoce la historia de esta enfermedad puede de alguna manera prevenir las complicaciones tardías, diagnosticar oportunamente y no esperar a que el paciente presente gangrena en las piernas o que tenga otro problema grave como la ceguera, que ya no se puede corregir.
La mayoría de las veces la persona con diabetes es diagnosticado con los síntomas que ya mencionamos aunque en ocasiones pasan desapercibidos. Por ejemplo, el paciente puede tener un poco más de sed o un poco más de frecuencia al orinar, pero no le da mucha importancia y tiempo después llegan a urgencias con un coma diabético. Este tipo de pacientes que no fueron diagnosticados oportunamente pueden incluso presentar complicaciones más adelante. Es por ello que la prevención es vital para combatir esta enfermedad.



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