Resultados de Laboratorio
Causas
El neumotórax puede producirse por motivos no identificables; los médicos lo llaman un neumotórax espontáneo. Un neumotórax puede también ser consecuencia de una lesión o de un procedimiento clínico, por ejemplo: lesiones por aplastamiento y lesiones ocasionadas en la RCP (Resucitación Cardio Pulmonar), que pueda lacerar o producir hematomas (coágulos sanguíneos) pulmonares.
Tipos de Neumotórax
Dependiendo de los factores que lo originen, el neumotórax puede ser:
Síntomas
Los síntomas varían mucho y dependen de la cantidad de aire que ha penetrado en la cavidad pleural y de la porción del pulmón que se ha colapsado.
Pueden consistir en:
Diagnóstico
Es posible que el neumotórax pueda detectarse con un chequeo rutinario, gracias al estetoscopio, sin embargo, para tener la certeza de la existencia de neumotórax, el médico puede recomendar una radiografía de tórax que determine la presencia de aire fuera del pulmón y/o la realización de un estudio llamado gasometría arterial.
Tratamiento
Un neumotórax pequeño habitualmente no requiere tratamiento. Generalmente no provoca trastornos importantes de la respiración y el aire se absorbe en pocos días. La absorción completa de un neumotórax más grande puede llevar de 2 a 4 semanas; sin embargo, se puede extraer el aire más rápidamente, mediante la inserción de un tubo torácico en el neumotórax.
El tubo se conecta a una válvula de una sola vía que deja salir el aire sin que refluya. El objetivo de este tratamiento es extraer el aire del espacio pleural, permitiendo así la reexpansión del pulmón.
Cuando este procedimiento no es suficiente, posiblemente sea necesaria una cirugía para evitar los episodios recurrentes.
Las expectativas de un paciente con neumotórax, dependen de las causas del padecimiento, ya que son éstas las que determinan la gravedad de la enfermedad. Debe consultar a su médico ante la presencia de sibilancia al momento de respirar. Aunque existe la posibilidad de que el neumotórax desaparezca por sí solo, es indispensable solicitar atención especializada para evitar que el padecimiento se complique o recurra.